Por: Stefano Baioni.
Luna Araujo, futbolista de la sub 16 de Rosario Central, realizó declaraciones respecto al momento que atraviesa como jugadora, la convivencia y relación con sus compañeras, y brindó detalles sobre cómo se prepara el plantel para afrontar las competencias.

Las futbolistas no están ajenas al periodo de incertidumbre que experimenta la sociedad, sobre todo en estos tiempos: el no saber qué va a pasar. Para transitar el camino, atravesando estos obstáculos, toma mayor relevancia la unión, la motivación y el compromiso: tres aspectos que cumple este plantel en cada entrenamiento. “Estamos concentradas y comprometidas en cada práctica, y a la vez, siempre surge alguna risa o chiste que refleja nuestra amistad dentro y fuera de la cancha”, expresó Luna.
Pese al desgano que generan los entrenamientos en modalidad virtual y el no poder asistir al club, la futbolista destacó el trabajo de las profesoras: “ellas nos motivan, tratan de divertirnos mediante juegos”. Además, resaltó la versatilidad de las jugadoras que componen el plantel al afirmar que “todas saben jugar en todos los puestos”.
Actualmente, Luna se encuentra cursando un esguince de tobillo que la marginó del contacto con la pelota. Aun así, subrayó la buena acción y predisposición de sus compañeras al preocuparse por su lesión: “no faltó ninguna preguntándome por mensaje, cómo estoy, cuándo voy a volver, cuánto tiempo me queda. Es un plantel hermoso”.
Para finalizar, la futbolista dejó en claro que el objetivo del equipo es ser campeonas con este club pero que, más allá del resultado de cada partido, “lo importante es terminar siempre unidas, evitando las peleas que podrían debilitar el rendimiento”.